María «La Molinera» y el asesinato de los dos polacos

Exposición «Miranda de Ebro y La Guerra de la Independencia 1808-1814» Soldado Regimiento Polaco del Vistula

Transcurre el año 1808 y en esta época era obligación de las poblaciones de acoger en sus propios domicilios a los soldados del ejercito Francés a su paso por la península camino de Portugal.

En este relato se trata de dos soldados polacos de la sexta compañía, del segundo escuadrón de caballería ligera de la Guardia Imperial Francesa, que les toco alojarse en casa del Molinero Nicolás Balza y de su mujer Magdalena Cantabrana, que estaba a las afueras de la ciudad el día 3 de abril de 1808 y fueron asesinados. Nicolás era natural de Grandival (Burgos) y Magdalena natural de Treviana (La Rioja)

Se llamaban Józef Rzędzian y Paweł Ciesielski de 27 y 17 años respectivamente

A la mañana siguiente cuando el grueso del ejercito partía para su lugar de destino en Portugal, los compañeros de estos dos soldados polacos se dieron cuenta de su ausencia e indagaron donde podían estar, en un principio algunos pensaron que desertaron, pero otros decían que era imposible que eran buenos soldados, hasta que aparecieron muertos en el río Ebro, en el «pozo redondo» que desde ese día se denominó «La Poza o pozo de los polacos»

Sobre este acontecimiento hay dos versiones diferentes, la versión de la justicia española y la versión de las fuentes polacas.

VERSIÓN JUSTICIA ESPAÑOLA

En la versión de la justicia española, según los papeles de la Chancilleria de Valladolid sobre el juicio, son asesinados por el hijo del molinero, Máximo Balza y el criado de estos Miguel Garcia

Según esta, Domingo Blanco Salcedo, alcalde de la localidad, recibió en su casa un pliego de manos de un suboficial francés, en el cual el Teniente Stanisław Rostworowski denunciaba la desaparición de dos de sus hombres. El alcalde, una vez revisada la casa donde se alojaron. ordena buscarlos por toda la población incluido el río y sus riberas. Son encontrados en el río en un pozo, cerca de la actual central hidroeléctrica.

Una vez efectuada la autopsia, se deduce que fueron asesinados y se acuso de este asesinato al hijo y criado del molinero.

Una vez dictada sentencia se les impuso las siguientes penas:

En conclusión, los castigos quedaron fijados de la siguiente manera:

  • Miguel Garcia (Criado) Culpable de asesinato. Pena ordinaria de muerte afrentosa en la horca
  • Máximo Balza Cantera (Cantabrana), culpable de asesinato. En atención a su minoridad (17 años) se le impuso una pena de diez años de presidio en Filipinas y a sacarle «a la vergüenza pública al tiempo que al García, acompañándole hasta el cadalso, viendo ejecutar la sentencia de aquel, y pasándola debajo de la horca»
  • Nicolás Balza, cómplice de ocultación y perjurio. Cuatro años de presidio «en uno de los de África y las costas del proceso»
  • (María) Magdalena Cantera Cantabrana, cómplice de ocultación y perjurio. Cuatro años de galeras y los costes del proceso;
  • Juana Balza Cantera (Cantabrana), inocente. Salió en libertad.

VERSIÓN ESCRITOS POLACOS

Según la versión polaca, por parte del Coronel Bonawentura Count Zaluski, la verdadera asesina fue María «La Molinera», la mujer de Nicolás, aunque en los escritos del juicio, se la nombra como Magdalena Cantera Cantabrana, supongo que llevaría el nombre de María por delante y en la partida de su defunción, la de su marido y la de su hija Juana, se la nombra como Magdalena Cantabrana.

El coronel dice: «La principal autora fue la molinera, mujer de gigantesca figura y fuerza, de mente arrogante. Ella, con la ayuda de los criados del molinero, atacó a los adormecidos soldados, no sospechosos de que su anfitriona les traicionase».

Y asi mismo el Coronel manifiesta que la causa del asesinato era «odio a lo extranjero y fanatismo patriótico de la molinera. (…) Hablo de fanatismo porque todavía no había ninguna acción y menos una declaración de guerra. Al contrario, íbamos como amigos»

FUSILAMIENTO

Debido al levantamiento del 2 de mayo, la sentencia no se ejecutó de inmediato y se les encarceló en la cárcel de Miranda. Pero el Mariscal Bessiéres, ordeno al General Ducos en ese momento en Miranda, que conminara al alcalde de Miranda, Domingo Blanco Salcedo, a que ejecutara la sentencia, antes las disculpas de este y el retraso en la ejecución, tomaron la determinación de fusilarlos, a las 5 de la tarde del 12 de junio de 1808, son fusilados, Miguel y Máximo, por la infantería francesa, en la zona del «pozo redondo», donde fueron encontrados los soldados muertos.

A finales de julio Nicolás Balza y su esposa seguían en la cárcel reafirmándose en su inocencia y reclamando su salida de prisión. No se sabe cuando les sueltan, pero ella muere en Miranda de Ebro el 27 de Junio de 1829 y el también en Miranda el 2 de febrero de 1832.

ENTIERRO

Fueron enterrados en Miranda de Ebro, celebrando su funeral el 5 de abril de 1808 en la iglesia de Santa Maria de Altamira, acudiendo a dicho funeral aparte de los habitantes de Miranda, toda la oficialidad y tropa francesa, el Ayuntamiento en pleno, el guardián del Convento de San Francisco, los comisarios españoles de Hacienda y Guerra, los cabezas de hermandades, gremios y restantes corporaciones.

ANÉCDOTA

Según la historiadora riojana Cristina González Caizán que actualmente es profesora universitaria en Varsovia. en algunos lugares de Polonia cuando un niño se porta mal le dicen que tenga cuidado porque sino, «viene María la Molinera de Miranda y te llevará con ella».

BIBLIOGRAFÍA

Real Chancilleria de Valladolid «Pleito de la justicia de Miranda de Ebro contra Máximo Balza, molinero, y su criado Miguel García, vecinos de dicho lugar, por haber dado muerte violenta a unos soldados polacos llamados Azendrías y Cenilski …»

Archivos eclesiásticos de Miranda de Ebro, iglesias de Santa Maria y San Juan

Revista Historia Militar, nº 106 Año 2009

María la Molinera. Exposición «Miranda de Ebro y La Guerra de la Independencia 1808-1814»

 Autor: José María García Nozal (Integrante de la Asociación AMIGOS DEL CASTILLO)